SERUM VS CREMA HIDRATANTE: Estas son sus principales diferencias

Todos los días dedicamos mucho tiempo a nuestro tratamiento facial, y quizá alguna vez nos preguntamos si podríamos prescindir de algún producto. ¿Realmente necesitamos un sérum y una crema hidratante?

Los expertos en belleza aseguran que sí. Aunque ambos hidratan y revitalizan la piel, tienen funciones muy diferentes. De hecho, para lograr los mejores resultados hay que usarlos simultáneamente.

Sus diferencias:

  • Textura. Con una importante concentración de principios activos, los sérums penetran en las capas más profundas de la piel. Su textura fina y ligera permite una rápida absorción. En cambio, la crema suele ser más untuosa. Contiene más agentes emolientes y menos agua. Aunque comparte algunos ingredientes activos con los sérums, su objetivo principal es mantener la piel hidratada, de ahí su nombre.
  • Función. El sérum tiene un rol básico según las características de la piel: brinda luminosidad, antiarrugas, hidratación… Su objetivo es tratar y, además, reforzar los efectos de la crema. En cambio, las fórmulas de las cremas hidratantes contienen una mayor cantidad de ingredientes activos como las vitaminas C y E, el ácido hialurónico y el retinol para solucionar problemas específicos de la piel como la hiperpigmentación y las líneas finas de expresión.
  • Aplicación: el sérum, como está formulado para ir a la profundidad de la epidermis, es aconsejable complementarlo con una crema que proteja la capa más superficial de la piel.

Cómo deben aplicarse

Se recomienda colocar el sérum una vez por la mañana, antes de la crema habitual, y otra por la noche. Después de la higiene se usa un tónico y, recién entonces, el sérum, para que no exista una barrera como podría ser una crema entre la piel y los activos del producto y esto dificulte su absorción.

Luego, colocar el contorno de ojos y la crema hidratante. Y, en último lugar, el protector solar, si es de día. Otro dato importante: con dos gotas de sérum se cubre rostro, cuello y escote, así que no es necesario aplicar demasiada cantidad. Colocar sobre la palma de las manos y comenzar a poner por la parte interior del rostro y hacer movimientos circulares hacia la parte exterior. Es importante que se absorba bien antes de seguir con el siguiente paso.

Distintos tipos de sérums

  • Con vitamina C: ayudan a contrarrestar los daños de los radicales libres y a iluminar la piel.
  • Con retinol: es eficaz contra las manchas, las marcas de acné y el envejecimiento cutáneo. Se recomienda el uso de este tipo de sérum por la noche, en combinación con un protector solar por el día.
  • Con ácido hialurónico: esta sustancia está presente en nuestra piel de forma natural y es un activo capaz de retener hasta mil veces su peso en agua. De ahí que su función principal sea la de hidratar la piel. Además, tiene un ligero efecto relleno.
  • Para el acné: el sérum especial para esta afección ayuda a eliminar las marcas, pero también desobstruye los poros y afina la textura de la piel, dejándola muy suave. Contiene activos que permiten corregir y prevenir las imperfecciones. En este caso, son interesantes las fórmulas queratolíticas (acción exfoliante), los ingredientes antibacterianos, los seborreguladores (como el ácido salicílico o el retinol), los antiinflamatorios (niacinamida).

Antimanchas: contienen fórmulas despigmentantes que controlan la síntesis de melanina. Incluyen ingredientes como el ácido azelaico, la vitamina C, el ácido retinoico y el retinol.